La comarca alicantina de la Marina Alta es una de las más turísticas del Mediterráneo levantino, pero hay muchos rincones que a veces pasan desapercibidos, sobre todo las primeras veces. Por eso te hemos preparado una guía para que sepas qué ver, qué hacer o dónde comer en tu próxima escapada a este paraíso mediterráneo.
Dénia
La capital de la Marina Alta esconde joyas naturales como Cova Tallada (a la que se puede llegar caminando o en kayak), Les Rotes (playas de rocas con un impresionante paseo) o el Parque Natural del Montgó, que precisamente delimita Dénia y Jávea. Allí está el Cabo de San Antonio, uno de nuestros lugares preferidos para ver atardecer.
Dénia es además Ciudad creativa de la gastronomía por la Unesco, por lo que la oferta de restaurantes es de calidad y muy variada. El Pegolí, Casa Federico, El Faralló, El Baret de Miquel, Restaurante Mena, Primera Línea o Pont Sec son apuestas seguras. ¡No te vayas sin probar su famosa gamba roja de Dénia!
Tampoco puedes perderte Els Magazinos: el mercado gastronómico y cultural de Dénia, que, con más de 20 espacios gastronómicos diferentes, es el epicentro de la vida mediterránea en la zona. La terraza del restaurante A la Fresca es como un sueño de una noche de verano. Pásate también por su Lonja de la cultura, que acoge cada mes una exposición de un artista mediterráneo diferente.
Cuando vayas, aprovecha para acercarte a La Xara, donde está el Obrador La Sana. Allí podrás comprar el mejor pan de la zona: hogazas de centeno, trigo integral, espelta, focaccias o, los fines de semana, también panes especiales, con ingredientes que te sorprenderán.
Jesús Pobre
Esta pedanía de Dénia es de imprescindible visita los domingos: allí se organiza el Mercat del Riurau, un mercado de productores locales que reúne a agricultores, artesanos o panaderos. Podrás comprar frutas y verduras ecológicas (aguacates, nísperos, almendras o naranjas son algunos de los productos más destacados de la zona), pero también cocas de la Marina, embutidos típicos, vinos locales o artesanía. El primer domingo del mes, el mercado es un rastro de antigüedades.
En Jesús Pobre está también Les Freses, una preciosa bodega rodeada de viñedos de variedades autóctonas, donde organizan visitas guiadas con cata. Aprovecha y llévate alguno de sus vinos para regalar: Àmfora, Tallaruques y el Dolç son algunos de nuestros favoritos.
Para cenar, reserva mesa en la terraza de La Tasca de Jesús Pobre.
Pedreguer
Uno de nuestros rincones favoritos de la comarca está allí: el Jardín de L´Albarda, un exuberante jardín mediterráneo de más de 5 hectáreas que se puede visitar todos los días del año. Es un remanso de paz en el que puedes simplemente estar para observar la naturaleza, leer o pintar. También organizan conciertos, clases de yoga o meditación.
Xaló
Su gran rastro de objetos antiguos, conocido en toda la comarca, es los sábados por la mañana. Un consejo: ve pronto para encontrar piezas únicas de decoración típicas de España. Esta zona también tiene mucha tradición vitivinícola, por lo que hay varias bodegas que se pueden visitar, como la de Pepe Mendoza.
Calpe
Turístico e internacional, Calpe es uno de los pueblos de la Marina Alta bañados por el Mediterráneo. Su espectacular Peñón de Ifach impresiona desde el mar o desde tierra: puedes subir hasta el pico de este parque natural reservando previamente (y con calzado adecuado). Sus playas de arena, su lonja, la icónica Muralla Roja (no visitable pero en la que puedes alojarte), las pintorescas calles de su casco antiguo, sus restaurantes de alta cocina (tiene 3 restaurantes que suman 3 estrellas Michelin y 4 Soles Repsol: Beat, Audrey´s y Orobianco) son otros de sus reclamos.
Teulada-Moraira
Este encantador pueblo marinero es perfecto para dar un paseo, tomar una horchata en Los Jijonencos e ir de compras. Allí, por ejemplo, está la famosa tienda Dona Alpargata: en esta alpargatería, a la que viene gente incluso de otras provincias, podrás elegir entre decenas de modelos de este calzado tan mediterráneo. ¿Nuestro secreto? No te pierdas la Playa del Portet.
Benissa
En este bonito pueblo está la Iglesia de la Puríssima Xiqueta, conocida como la Catedral de la Marina Alta: un edificio neogótico que impresiona. Además de callejear y perderte por sus rincones, también puedes descubrir su desconocida costa, entre Calpe y Teulada-Moraira: el Paseo Ecológico de Benissa conecta varias calas, como la Playa de la Fustera (de arena) o la Cala del Advocat. Muchas tienen chiringuito, por lo que es un plan ideal para pasar todo el día.
Gata de Gorgos
Es el pueblo más famoso de la zona por la artesanía del mimbre, el yute o el esparto: su calle principal, justo por donde pasa la carretera, está llena de pequeñas tiendas que venden sillas, capazos, lámparas o alfombras. Si quieres comer allí, te recomendamos El Corral del Pato.
Benitatxell
Una de las playas más turquesas de la zona (con permiso de La Granadella), está en Benitatxell: es la Cala del Moraig, enclavada entre imponentes acantilados. Actualmente el acceso a la misma solo se puede realizar caminando, aunque el camino está asfaltado. Te fascinará la Cova dels Arcs, una fotogénica cueva (tanto desde el mar como desde la costa) en la que bucean expertos submarinistas. Si quieres verla, ve con precaución y calzado adecuado, porque las rocas resbalan.
También puedes realizar la Ruta de los Acantilados: un paseo que conecta esta playa con la Cala Llebeig. Un consejo: evita ir en temporada alta.
Alcalalí
La primavera, en la comarca de la Marina Alta, comienza en Alcalalí. Aquí es donde cada año, en febrero, se celebra Feslalí: el festival del almendro en flor. Podrás disfrutar de rutas guiadas, concursos de fotografía o de cocina y menús especiales con la almendra como protagonista.
Y, ya en el interior de la comarca, hay varios valles que poca gente conoce pero que son una auténtica joya: La Vall de Laguar (especialmente recomendable en primavera, cuando florecen los cerezos, y en junio, cuando se recoge la cereza), Vall de la Gallinera (sus 8 pueblecitos esconden rutas de senderismo y rincones naturales como la Foradà que te cautivarán), Vall d´Ebo o Vall d´Alcalá. ¡La comarca de la Marina Alta te está esperando!